Tengo que confesar, que hay noches, en las que no puedo parar de pensar en vos. Es inevitable recordar, lo que fuimos, lo que éramos. Y es esa angustia mezclada con rencor la que me agarra. Te extraño, extraño lo que eras para mí. Tenías eso, eso que te hacía diferente a los demás. Algo especial, algo mágico que hacía que te quisiera cada día más.. Hasta los errores, y las peleas los considero como buenos recuerdos, porque me ayudaron a aprender mucho. Admito, extraño tu mirada, los besos en el cuello y los te quiero en el oído que tanto me gustaban. Pero ya no muero por eso, ahora soy fuerte. Soy fuerte y me siento capaz de mirarte a la cara y decirte de frente, que aunque te quiero, y te voy a querer siempre, PUEDO SEGUIR SIN VOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario